La Piscina municipal ampliará su zona de calentamiento y dispondrá de gradas.

La Piscina municipal de Teror ampliará su zona de calentamiento, donde además se ubicarán gradas plegables, situada en el lateral oeste de la piscina. Con esta modificación del proyecto inicial se mejorará la instalación deportiva, actualmente en obras, atendiendo a su funcionalidad y a las necesidades de los usuarios/as.

 

La obra que está llevando a cabo la empresa constructora Construplan cuenta con un presupuesto de 1,6 millones de euros, de los cuales el Ayuntamiento asume casi la totalidad con 1.528.622,50 € y el Cabildo de Gran Canaria aporta 114.301,67 €.

Las obras de reforma integral de la piscina municipal de Teror, iniciadas el pasado mes de febrero, continúan a buen ritmo tras los primeros trabajos de demolición de tabiques, alicatados, ventanales, etc. Actualmente se está trabajando en el refuerzo de la estructura dañada del edificio, mejorando tanto los pilares interiores como exteriores. Posteriormente se desmontará la cubierta de la instalación para la colocación de una nueva, y finalmente culminar con los trabajos de albañilería, alicatados, pavimento, pintura, etc.

La remodelación contempla también el traslado de la zona de vestuarios desde la planta baja a la alta, junto al vaso de la piscina, incluyendo accesos y espacios para Personas con Movilidad Reducida, taquillas, bancos, duchas y baños. En la planta baja se crearán zonas con distintos espacios para actividades deportivas y una gran sala polivalente, que estará en contacto con el espacio libre exterior. También se reordenarán las zonas de servicios de la planta baja, solventando la accesibilidad con la planta alta mediante la instalación de un ascensor.

Entre los objetivos del proyecto, además de cumplir las condiciones de acceso para personas con movilidad reducida (PMR), potenciar el espacio adaptándolo a las nuevas demandas de los usuarios y adaptar el recinto a las vigentes normativas sectoriales, se destaca maximizar la eficiencia energética y sostenibilidad del recinto, adecuándolo a la normativa de edificios de consumo casi nulo. En tal sentido se pretende dotar al edificio de las instalaciones que permitan el cumplimiento o adaptación a la normativa  nZEB o ECCN (Nearly Zero Energy Building / Edificios de Consumo Casi Nulo).